foto: NICTA |
La humanidad se olvidará lo que es el dolor corporal. Esta idea revolucionaria fue propuesta por los investigadores del Instituto Nacional de Investigación NICTA de Australia, durante los dos últimos años. Los científicos son expertos en ingeniería biomédica, eléctrica y mecánica, asi como en tecnología textil y en aplicaciones de programas informáticos (software). No obstante, aquellos que deseen deshacerse del dolor se tendrán que convertir el algo de persona cyborg. En los organismos de las personas se introducirán dispositivos en miniatura que mediante impulsos especiales les ayudarán a deshacerse de los sufrimientos.
El bloqueador del dolor será un chip inteligente diseñado a partir de materiales polímeros (de hilados e hilos). El chip estará colocado en un dispositivo especial compatible biológicamente con el organismo humano. En tamaño, este microcircuito electrónico no excederá el cabezal de un fósforo.
Según los investigadores australianos, el chip será introducido en el cuerpo humano y conectado con cables a la médula espinal.
Los cables además se conectarán a otro dispositivo electrónico dentro del cuerpo. Este dispositivo contendrá una batería y un procesador de ordenador, para efectuar procesamientos de cálculo. La función de la batería, sera alimentar de energía al chip y al procesador. La batería se recargará desde una fuente externa mediante la tecnología inalámbrica.
El chip introducido en el cuerpo del paciente, empezará a registrar y medir señales, que los nervios transportan hacia el cerebro. El chip determinará las señales responsables de transmisión de datos del dolor, y los bloqueará mediante impulsos eléctricos de poca intensidad de 10 voltios. En consecuencia, el resultado será como que el chip le engaña al cerebro, porque este no llegará a recibir la señal del dolor que ocurre en el cuerpo.
En principio, de este modo se puede bloquear cualquier tipo de dolor, pero, los innovadores australianos tratarán en primer lugar de ayudarles a las personas de deshacerse de los dolores crónicos de la espalda, piernas, migrañas, temblores de la enfermedad de Parkinson o convulsiones epilépticas, etc.
Los científicos decidieron abordar el problema de deshacerse de los dolores, debido a que, según las estadísticas, los sufrimientos de las personas con dolores crónicos, le cuesta sólo a la economía australiana 34,3 mil millones de dólares anuales. Además, en Australia se acumulan al año cerca de 36 millones de días laborables, cuando las personas no estan en estado de acudir a trabajar debido al mal estado de salud. Los inventores suponen que equipando a las personas con chips bloqueadores del dolor, estos significativamente elevarán el rendimiento de los trabajadores.
Como le explicó al corresponsal del diario RBC daily, el jefe del Departamento de Actividad Nerviosa Superior de la facultad de Biológia de la Universidad Estatal de Moscú, el profesor Shulgóvskiy Valery, la invención se basa en la denominada: Teoría de control de la puerta (portal) del dolor. Se sabe que a través de la raíz dorsal de la médula espinal, ingresan señales de dolor por las fibras más delicadas. Si se polariza la superficie de la médula espinal con corriente da baja intensidad, se suprimirá el ingreso de las señales portadoras a través de la raiz dorsal, y de esta manera se bloqueará el dolor, sin la ayuda de los medicamentos. Estos experimentos de argumentación se efectuaron con animales y pacientes.
"Cabe señalar que la sensación de dolor se crea en el ser humano directamente en su cerebro. Por la parte central del cerebro pasa el acueducto cerebral de Silvio (mesenséfalo), que es un canal que une el tercer ventrículo con el cuarto. En torno a este se encuentra la materia gris. La estimulación de esta zona también provoca la pérdida del dolor. El dolor es un sistema distribuido en varias fases del cerebro. Pero en sí, el ser humano no debe de vivir sin sensaciones de dolor. Existen casos médicos de personas, con ausencias de dolor, como resultado de fallas genéticas en sus desarrollos, que murieron a edades muy tempranas a causa de fracturas óseas o contusiones, que no los sentían como efectos dolorosos ", - advirtió el científico.
El dispositivo del Instituto NICTA será probado en las personas a partir del próximo año.
* * *Adaptado y publicado por Mauritz.
Fuentes: ZDNet ; RBC daily
No hay comentarios:
Publicar un comentario