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| (imagen: orees.ru.com) |
En la Navidad, los humanoides alados se vuelven especialmente populares. Pero, ¿de dónde provienen? La historia de las ideas sobre los ángeles refleja las vicisitudes milenarias del pensamiento religioso. La palabra "Angelos" es una palabra griega que significa el "Mensajero". En la traducción griega de la Biblia, con esta palabra se les denominaban: mensajeros de Dios.
Los ángeles adquirieron la apariencia habitual para nosotros, sólo en el siglo XIV, como por ejemplo, en esta imagen.
En los primeros días el Cristianismo, algunos creyentes creían que Jesucristo era un ángel más, según Muehlberger, que está trabajando en un libro sobre la evolución de la teología de los ángeles. Esto se sabe porque los autores de fines del siglo IV realizaron grandes esfuerzos para refutar estas ideas. Jesús "oficialmente" perdió el estatus de ángel sólo en el año 325 en el Concilio de Nicea, que fue convocado por el emperador romano Constantino I, para que los obispos cumplan la misión de unificar en una sola teología los conceptos de Dios, Cristo y Cristianismo. Solamente allí se "definió" que Cristo tiene la misma naturaleza que Dios. Además, se sobreentendía que los ángeles son otra cosa.
Una mente maravillosa
Pero en sí, ¿quiénes son? Las ideas sobre los ángeles eran tan diversas, como los puntos de vista de los primeros cristianos sobre Cristo. El monje cristiano y el asceta del siglo IV, Evagrio, por ejemplo,
desarrolló una teoría para explicar la esencia del ser humano como dividida en tres partes: "La parte "inferior", que es gobernada por nuestros deseos, la que nos hacer tener hambre, sueño o que despierta nuestro deseo carnal, explica Muehlberger. La segunda, es la parte emocional, la que nos vuelve arrogantes o desata nuestra ira. Y por último, tenemos la parte racional, que es justamente la que nos hace más parecido a Dios y a los ángeles". En opinión de Evagrio, la ira es algo así como el demonio, que aparece y nos ataca. Y si no podemos hacerle frente por sí solos, en nuestra ayuda acude el ángel racional. Otros siguieron esta teoría y afirmaron que los ángeles eran "mentes" o "intelectos" incorpóreos.Ángeles para todos
Entonces se iniciaron los debates sobre si a todos les ayudan los ángeles en la Tierra. "Estos monjes pensaban que no todo el mundo tenía un ángel de la guarda, sino que tenerlo era señal de éxito moral", afirma Muehlberger, haciendo referencia a cartas de esa época que describían la necesidad de los monjes por conseguir sus propios ángeles. Sin embargo, en las ciudades la versión era más democrática. Los obispos y otros servidores de la iglesia comenzaron a afirmar que todos tenemos un ángel de la guarda. En Egipto, incluso surgió la hipótesis de que los verdaderos ascetas que renuncian a los placeres carnales y a la familia eran ángeles terrenales. Sin embargo, los monjes egipcios rechazaron modestamente en seguida esta idea, declarando, en palabras de Muehlberger, "actuamos como animales, no como ángeles". Al final esta visión fue la que salió vencedora: "yo no soy un ángel, ni tú tampoco, pero están ahí, en algún sitio, cuidando de nosotros".
Jerarquía celestial
Apenas los creyentes comenzaron a ponerse de acuerdo sobre la esencia de los ángeles, los estudiosos comenzaron a debatir sobre cómo se organizaban los mensajeros celestiales. La Biblia arroja poca luz sobre la sociedad de estos seres, pero varios eruditos escribieron sobre el tema, incluyendo el autor desconocido (de nombre cifrado Pseudo Dionisio) de la "Jerarquía Celestial", del año 500 antes de Cristo, aproximadamente. El libro los clasifica en nueve categorías, que son, de la más baja a la más alta: ángeles, arcángeles, principados, potestades, virtudes, dominaciones, tronos, querubines y serafines. Aunque la iglesia esta jerarquía no lo reconoció.
No se trataba de una enseñanza eclesiástica oficial, afirma Michael Root, teólogo de la Universidad Católica de América, en Washington, D.C. Cavadini añade "creo que el hecho de que estos niveles fueran tan distintos y a la vez interdependientes contribuye a la belleza del universo y conduce a la armonía en lugar del enfrentamiento".
Ángeles caídos
Por supuesto, no todos los angeles son buenos, así lo reflejan algunas tradiciones cristianas. El propio Satán, según se dice, fue una vez un ángel llamado Lucifer, pero que después cayó. Según Root, la teoría de que los ángeles pueden "caer" es muy importante, pues significa que tienen libre albedrío. "Algunos teólogos de la Edad Media, incluso, pensaban que cada persona tenía un ángel caído, al igual que tenía un ángel de la guardia, aunque nunca fue una teoría oficial", comenta Root. Una serie de teólogos medievales finalmente ha supusieron que por el alma humana libran lucha dos ángeles: el ángel caído y el ángel de la guarda. Parte de de la doctrina de la iglesia, esta teoría tampoco llegó a ser, pero es popular en el pueblo hasta el día de hoy.
Según Cavadini, de la Universidad de Notre Dame, ciertos eruditos cristianos de los siglos II y III, como Orígenes de Alejandría, daban gran importancia al papel de los ángeles caídos en el plan de Dios. "Para Orígenes y otros padres de la iglesia, los ángeles participaban en el gobierno del universo según la voluntad de Dios", aunque tentando al hombre y haciendo otras cosas desagradables, afirma. "Lo que incluye también a los ángeles caídos, aunque estos participaban de forma negativa". (Ver también "Según una nueva interpretación del Evangelio, Judas fue un "demonio"").
Los ángeles en Estados Unidos
Los historiadores ingenuos suponían que la Edad Media quedó muy atrás. Pero, no fue así!.
A pesar de que en la actualidad los estadounidenses, no pasan tanto tiempo pensando en los ángeles como los antiguos estudiosos, suelen creer que se encuentran entre nosotros. Cerca del 55% de los estadounidenses cree que en algún momento de sus vidas les ha protegido su ángel de la guarda, según una encuesta de 2008 realizada por la organización Gallup a solicitud de la Universidad de Baylor.
"He consultado unas 1.100 historias sobre experiencias con ángeles de la guarda", comenta el sociólogo de Baylor, Carson Mencken. "Algunas hablan de accidentes de coches, sobre todo aquellos en los que falleció alguien. En otras sus protagonistas fueron víctimas de ataques, tuvieron experiencias cercanas a la muerte en la guerra o casi murieron ahogados", afirma. (Ver "¿Una explicación para las experiencias cercanas a la muerte?"). "Lo que nos asusta es no saber cuándo podemos morir, porque no podemos hacer nada para controlarlo".
"Según nuestro estudio, muchas de las personas que sobrevivieron a estas experiencias dicen que fue gracias a sus ángeles de la guarda", añade, "en la mayoría de los casos no ven a los ángeles, sino que los sienten".
En la actualidad, para algunos cristianos estos ángeles existen de verdad y son tan reales como los que se ven durante los días cuando se adornan los árboles.
---Publicado por Mauritz. (ref.: National Geographic; Esoreiter.ru)
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